RESPETO

El pasado 28 de Marzo, se celebró el acto conmemorativo de la Reconquista de Vigo, en la Plaza de la Independencia. Allí acudió nuestra Alcaldesa a decir algo, no sabemos qué, porque no se la oía. Así será siempre que podamos, Sra. Porro. Mientras pretenda acallarnos a nosotros, le pagaremos con la misma moneda. Esto vale para Ud. y todos los políticos que pretenden aprobar este Plan ilegal e injusto.

Algunos dicen que estábamos a reventar un acto que es de todos los vigueses. Y tanto que es de todos, nuestro también, ¿o es que somos vigueses de segunda?. Claro, se nos olvida que existe clases, ¿no?. Están los que, obnubilados por el brillo del oropel, se dejan seducir por el poder y el dinero, y van como borreguillos donde les dicen y se creen lo que les cuentan, no vaya a ser que si cambia algo pierdan la pensión. También están los otros, los que escépticos ven que las cosas son grises la mayoría de las veces y no blancas o negras, o del color que diga el que da el discurso. Pues así estamos, nosotros defendiendo nuestras casas y otros, paraguas en ristre, amenazando porque le fastidiamos con nuestros silvatos y no podían oír a la Señora. Estos son los que dicen aquellas frases sin desperdicio como "Si Franco levantara la cabeza"´, "Ya os ponía yo dónde merecéis", y otras de ese pelo. Que nadie malinterprete esto que decimos, no estamos haciendo alusión a ningún partido o ideología políticos, si no a una forma de ver, sentir y entender las cosas.

Parece que con vestir de pieles, ser "gente de orden" y tener amigos donde se debe, ya son dueños y señores del respeto ajeno. Y se merecen respeto, claro que sí, piensen lo que piensen. Ese respeto lo manifestamos en todo momento, salvo a quién nos lo niega a nosotros y a nuestras casas y derechos. Político que apoye esta vergüenza de Plan, político al que haremos callar con todos los medios a nuestro alcance y allá dónde podamos.

Pero volvamos al respeto, el que nosotros mostramos. La celebración empezó con alguna que otra danza, que nosotros, como se puede ver en la secuencia de fotos siguiente, dejamos celebrar tan tranquilos, e incluso aplaudiendo:

Eso sí, en cuanto la Señora abrió la boca...pitos, gritos, abucheos y lo que se merece quién quiere llenar los bolsillos de cuatro mangantes con el fruto del esfuerzo de gente honrada que no tiene otra culpa que la de haber hecho su casa dónde otros quieren levantar torres.

Después, la ofrenda floral y los himnos gallego y español que respetamos en el más absoluto de los silencios. Respeto, señores, respeto, ése que Uds. reclaman para sus mítines y niegan a los que quieren atropellar. ¿Es justo rasgarse las vestiduras por la gente que ha comprado viviendas ilegales? Naturalmente, con más motivo porque Uds. firmaron licencias ilegales a sabiendas. Claro, esta gente les da pena y ya hablan de indemnizar y realojar. Y digo yo, los que estamos legalmente viviendo en nuestras casas, ¿Por qué nos quieren echar?, ¿No será porque todavía no han ganado un duro con las licencias de nuestras casas?.

Para nosotros no hay realojo ni indemnización en ninguna parte. ¡Ah, coño! Se me había vuelto a olvidar lo de las clases, nosotros somos de la clase que no da pena a nadie, como la mala hierba, que hay que cortar. Pues señores, a veces la mala hierba pica, pincha y escuece, y eso haremos con Uds. hasta que nos respeten. La Señora, no pudo hablar, pero dejamos bailar una vez más a las agrupaciones de danza. Sólo hizo falta que lo pidiera el director y nos apartamos. Curiosa imagen, lástima de vídeo, porque el cordón policial venía detrás nuestro mientras nos apartábamos. En lugar de ser ellos los que nos empujasen, parecíamos ser nosotros los que tirábamos de ellos.

En esta foto se puede ver a una policía entre nosotros y los que bailaban, con los políticos al fondo. Parece bastante tranquila la chica, me imagino que suponía que la íbamos a respetar. El respeto, bonita palabra